
Cuando los individuos comienzan a sentirse desesperados, esta aspiración al dialogo religioso se hace más fuerte. Cuando las dificultades y contrariedades nos apabullan, vemos en el encuentro con Dios, la posibilidad de una salida. Cuando todas las puertas se cierran, la espiritualidad puede ser un oasis en medio del dolor. Esta situación de desamparo espiritual, permite que algunos estafadores engañen nuestro legítimo deseo de solución por vía del camino espiritual...

Detrás de la desgracia y el dolor, hay un grupo de delincuentes que buscan explotar al máximo a quienes sufren. Cuando la miseria asola y el dolor humano se manifiesta con más fuerza, los falsos videntes comienzan a especular con buenas ganancias... Es posible que las envidias, los maleficios, los trabajos o las energías negativas existan. Es posible que algunas enfermedades tengan un origen espiritual o psicológico. Pero no es justo lucrar con ellas, aprovechándose de la gente. En toda profesión existe el fraude. Pero en el mundo paranormal las estafas son especialmente abundantes. Y las posibilidades de engaño no tienen límite; cuando la angustia parece aplastarnos....
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