jueves, 16 de febrero de 2012

Fariseos o caraduras

Dicen que los actos humanos, son un reflejo de la esencia de quien los ejerce. Así se espera de la Madre Teresa que practique actos de caridad y de Hitler actos deleznables. Pero cuando intentamos definir la actitud de nuestros legisladores, por la que han aumentado sus dietas en un cien por ciento, se ha escuchado una amplia gama de definiciones populares. Dejando de lado las palabras agresivas, han resonado términos tales como caraduras, sin vergüenzas, chorros, atorrantes, pícaros o vivos... Más allá del amplio ingenio popular, preferiría definir esa actitud como farisaica... Cristo ha criticado esta hipocresía de los que “atan pesadas cargas y las ponen sobre las espaldas de los hombres”. Sus actos de piedad no son más que un engaño, detrás de una apariencia de santidad. Parecen un sepulcro blanqueado por fuera pero en su interior no ostentan más que huesos de muertos y podredumbre... * Texto completo.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Horacio, recién leí lo que te pasó cuando te aplicaron la vacuna del H1N1, bueno a mi también me la aplicaron pero en diciembre de 2008 o sea antes de que empezara la terrible enfermedad que en México se volvió epidemia.
Yo no sabía nada de los efectos secundarios: empezé en la misma noche del día de la aplicación (miércoles) con dolor de cabeza, luego en la madrugada me desperté con un terrible dolor articular, logré dormirme de cansancio supongo porque el dolor era muy fuerte, en la mañana me desperté porque tuve un sabor a metal espantoso y yo que siempre he sido muy dura para volver el estómago empecé en el baño a tener arcadas ( no vomité). Ya en el trabajo empecé a tener un goteo de nariz y dolor de cabeza (jueves), ya de regreso empece con lagrimeo y dolor de garganta.
El viernes imposible ya con una gripe y tos. Y ya de ahí malísima, con temperatura yantibiótico porque degeneró en bronquitis no fuí al doctor (mi cuñado) solo me recetó por
teléfono. El caso es que estuve guardada por dos semanas cuidándome bien y ya no me agravé, aunque el dolor del pecho fué fuerte. El caso es que después sin ver relación alguna el dedo de enmedio del pie se me durmió y así estuvo como por seis o siete meses.Al año siguiente fueron las mismas personas que me vacunaron (porque pidieron registro) a que me volviera a vacunar contra la gripe "estacional" segun ellos) obvio no lo hice( esto se me hizo raro pero le dije a la jefa de personal que fue la que me llamó para decirme que estaban los de la vacunacón).Bueno el caso es
que a partir de ese entonces no me he enfermado de gripa alguna ni la típica de cada año ni por estar cerca de otras personas con gripe. Así que si fué experimental o no???? a saber!!!!!
Saludos
María Eugenia González

nuevosprofetas dijo...

María Eugenia. Lamento que se experimente con nosotros como su fuéramos ratas de laboratorio. Espero que las nuevas vacunas sean mejores y no debamos seguir padeciendo semejantes torturas. Una saludo y gracias por tu comentario.